"Mujer en el baño de espaldas" (1808). También llamada "de Valpincon" de Jean Auguste Dominique Ingres (1790-1867).
Tu sosiego reposa en tus glúteos
sobre el lienzo blanco de tu banqueta
y los pliegues ahuecados reciben el calor de tu piel.
Tus cabellos recogidos en un turbante oriental
desanudan tu cuello fragante
que se continúa en tu espalda infinita de luz
y se alarga en tus piernas jóvenes
cruzadas al descuido
mientras, entre el lienzo, se abrigan
y juguetean tus pies con el rojo de tus zapatos.
Oyes distraída el sonido del agua
que se desliza desde los grifos de bronce
a una piscina que te espera para envolverte
y reposas con pudor enrollando una toalla en tu brazo.
Olvidada del mundo y encerrada en tus ensueños
pareces distante pensando trivialidades
o rememorando algún secreto acaricias el lecho.
Tu rostro apenas se percibe,
no miras las colgaduras que te enmarcan.
Tal vez tus sueños siguen en pie
y en el tiempo suspires
por una ternura que se quedó perdida
en aquella tarde luminosa
cuando el mundo era armonioso todavía.
Marta Alicia Pereyra
Morteros, 12-02-09
7 comentarios:
Me ha gustado muchisimo.
Un saludete
Gracias, Chche, por tu generosidad.
Cuando el mundo era armonioso todavía... es la nostalgia más dolorosa, que nos arranca de nuestros pies cosidos a la tierra y nos azota contra el muro, infranquable, del pasado.
Gracias, Lilith, por tan bellas palabras.
¡Vi luz y entré!
Precioso el blog, lo agrego a mis favoritos para visitarlo seguido.
¡Besos!
Gracias, Fersita, por tu visita.
Lástima que no te puedo visitar pues no permites el acceso a tu perfil, Fersita.
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